Adrián Pascual Urquía
Nació el 4 de abril de 1920, en Cañada de Álvarez (La Cruz), Provincia de Córdoba, Argentina.
Fue uno de los principales protagonistas de la historia empresarial argentina, con un fuerte espíritu emprendedor y una gran capacidad de realización.
Arraigado a su tierra y a su General Deheza, desde muy joven tuvo la intuición certera del enorme potencial del sector aceitero. Así, con el bagaje que le proporcionaron su formación empírica y el brillo de su inteligencia natural, identificó las claves de un contexto macroeconómico difícil, signado durante largos períodos por la inestabilidad y el estancamiento.
Su visión y compromiso social lo acompañaron en la búsqueda de las fórmulas más aptas para, en 1948, articular el sostén financiero de su iniciativa: fundar Aceitera General Deheza (AGD).
Sus contemporáneos reconocen su capacidad de liderazgo y recuerdan que supo imponerse con un tono discreto y amable, logrando unir las voluntades necesarias detrás del proyecto empresario.
Murió en 1996, a los 76 años de edad, con la certeza de que el espíritu fundacional que transmitió con sus acciones permanece intacto, y que su creación tiene un porvenir de crecimiento asegurado.